Graviky Labs es un grupo de graduados del MIT que desarrolló un método para capturar la contaminación del aire y convertirla en tinta ecológica que luego han comenzado a distribuir en diferentes tipos de productos.
En las palabras del equipo:
A lo largo de los últimos 150 años, la humanidad ha dependido en quemar combustibles fósiles directa o indirectamente para sus necesidades energéticas. La investigación ha demostrado que muchas muertes prematuras están directamente relacionadas al ambiente contaminado.
La exposición a partículas lleva a alrededor de 20,000 muertes prematuras en Estados Unidos cada año. Nuestra visión es capturar esa contaminación vehicular en una manera para que no llegue a nuestros pulmones.
El proceso inicia con un dispositivo colector de residuos, llamado Kaalink, que se instala, por ejemplo, en los tubos de escape de los automóviles, luego la sustancia atraviesa varios procesos para remover varios metales pesados y carcinógenos, de esto se obtiene un pigmento rico en carbón usado para producir varios tipos de tintas y pinturas.
La tinta resultante es llamada Air Ink y toma solo 45 minutos de emisiones de carbono de un solo auto para producir tinta para una pluma.
Es un proyecto asombroso y ecológico, pues además de reducir la contaminación ambiental lo convierte en algo útil.
No podemos esperar a que esto sea el producto común para escribir, aunque, lamentablemente habrá que esperar a que las grandes marcas de tintas y plumas volteen a ver esta clase de productos para que adopten sus buenas prácticas.
Via: Dezeen.
Estoy inciandome en esta area. Me gusto este aporte. Te felicito. Continuare leyendo tu Blog, Gracias.
Muy buena innovación!! Transformando con tecnología contaminación en algo útil! Bravo!!